Artículos Destacados

jueves, diciembre 10, 2009

Titanium desclasifica "chascarros" de la construcción del rascacielos más alto del país

Como "murallas gay" fueron denominados los muros subterráneos que contienen el agua de las napas y le dan la base al edificio. En rigor, el nombre real es muros invertidos, razón por la cual los maestros decidieron llamarlos así.

El edificio más alto del país, Titanium La Portada, comenzará a ser ocupado por sus inquilinos el 1 de enero de 2010 para ser inaugurado en marzo del mismo año. Aquello, es todo un hito para la historia de la construcción en Chile, pues es la primera experiencia en edificaciones que pasa los 50 pisos (tiene 56) y sube los estándares de infraestructura.

Sin embargo, y más allá de las ceremoniales que se realizarán a propósito de su puesta en marcha, el desarrollo de la iniciativa tuvo un sinnúmero de obstáculos que superar y particularidades que recién hoy salen a la luz pública.

El encargado de desclasificar "los archivos secretos de la torre Titanium", fue Víctor García, gerente General de la Constructora Senarco, firma encargada de llevar adelante las obras del edificio estrella del empresario-arquitecto Abraham Senerman, impulsor además de otras edificaciones del sector como edificio Milenium y El Bosque.

RECORD DE RAYOS

Era el verano de 2009 y un extraño día del mes de febrero rompía la clásica postal de cielos despejados de la estación más calurosa del año. De improvisto, ese día cayó sobre Santiago una tormenta eléctrica pocas veces antes vista. Aquel fenómeno climático, arrojó 90 rayos sobre la capital y Titanium por si sólo, atrajo 60 descargas rompiendo cualquier récord que hubiera al respecto.

"El pararrayos está hecho charqui, pero esa es la muestra de que sí hubo rayos y no cayeron en la estructura metálica", dice García, orgulloso de la anticipación de los ingenieros que ya habían probado la medida en la construcción de la torre Milenium, a la cual eso sí, sólo le cayó una descarga.

Antes de los rayos, la construcción tuvo que enfrentar un desafío que parecía menor, pero que con los días se fue agudizando y terminó siendo un verdadero dolor de cabeza para los ingenieros. Y es que una obra si comunicación entre sus trabajadores, difícilmente puede llevarse a cabo.

Precisamente, desde el piso 38 en adelante, ese fue el principal problema de Titanium, pues aunque parezca un enredo doméstico, a esa altura no existe cobertura de celular en Santiago y los radios tampoco funcionaban adecuadamente.

A problemas repentinos, soluciones a la medida: "pusimos antenas repetidoras en todos los pisos", cuenta García, con lo que el problema quedó solucionados de inmediato evitando que los maestros siguieran gastando sus gargantas en vano con gritos de un piso a otro, pero que no llegaban a ninguna parte.

Otra a de las "llamativas" costumbres que se dieron en la obra de Titanium La Portada, fue el sobrenombre que se le asignaron a varias de las estructuras que se acoplaron en el edificio.

Una de ellas, fue la denominación de "murallas gay" que se le dio a los muros subterráneos que contienen el agua de las napas y le dan la base al edificio. En rigor, el nombre real es muros invertidos, razón por la cual los maestros decidieron llamarlos así.

Así mismo, los "tirantes" antisísmicos que tiene el edificio, fueron bautizados como "tu hermana" y "tu prima", debido a su forma de fierros cruzados, en lo que seguramente, fue un arranque de creatividad de los obreros que en su mayoría son hombres.

Pero la obra no sólo se alimentó de historias como esas. Según García, como Titanium es el edificio más alto de Chile, tuvo que innovar en muchas áreas. De hecho, trabajar en altura significa un reto en logística que la obra tuvo que considerar.

"Tuvimos que inventar comedores, no podíamos estar bajando y subiendo a todos los viejos. Habían viejos que vivían en la altura las 24 horas prácticamente, comían, iban al baño, todo", recuerda el gerente General de Senarco.

Titanium, implicó en su construcción 13 mil 500 toneladas de acero, 60 mil metros cuadrados de hormigón, 36 mil metros cuadrados de vidrio, 700 trabajadores promedio por mes y una inversión de US$120 millones para una obra, que según García, "ni cuatro aviones Jumbo derribarían" y a que además, es "desarmable" para que las futuras generaciones no tengan dinamitarla.

Artículo original

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

ACLARACION: Este blog no es antiperuano ni nacionalista chileno. Este blog simplemente recopila y (a veces) comenta sobre artículos recopilados en la prensa nacional y mundial y que involucran a Chile. Si parece "cargado" hacia Perú, simplemente, es resultado de la publicación constante -y obsesiva- en ese país de artículos en que se relaciona a Chile. Así también, como ejemplo opuesto, no aparecen articulos argentinos, simplemente, porque en ese país no se publican notas frecuentes respecto Chile. Este blog también publica -de vez en cuando- artículos (peruanos o de medios internacionales) para desmitificar ciertas creencias peruanas -promovidas por medios de comunicación y políticos populistas de ese país- sobre que Perú ha superado el desarrollo chileno, lo que es usado en ese país para asegurar que Chile envidia a Perú y que por eso buscaría perjudicarlo. Es decir, se usa el mito de la superación peruana y la envidia, para incitar el odio antichileno en Perú.