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lunes, noviembre 20, 2006

Suerte para García, desgracia para Perú

En estas elecciones han triunfado las individualidades y han perdido los partidos, que no han logrado calar más hondo en lo local ni en lo regional.

Ello se debe a la crisis de los partidos. Lo interesante es que parecía que en el 2000 los partidos retomarían una influencia no sólo nacional, sino también local y regional.

Pero han perdido, primero, por el bajo desempeño de sus líderes, y segundo, porque los partidos no han logrado tener un proyecto más profundo, más democrático y eficaz, de descentralización y organización. En suma, no hay partidos nacionales.

Hasta 1989 los partidos ganaban elecciones nacionales, regionales y municipales. Después eso se quebró. En el 2000, el APRA ganó doce presidencias regionales, pero otra vez se ha hundido. Y hoy estamos en lo más hondo de la crisis porque los partidos han perdido raíces sociales y regionales, y lo que surge ahora son líderes locales, pequeños caudillos.

El Perú no puede seguir así, pues lo que ha triunfado es la fragmentación: las personas, los líderes o los “caudillitos” locales. El país no va a ningún lado con el triunfo de la fragmentación. ¿Qué vamos a hacer con tanto caudillo, tanto liderazgo independiente a nivel local y regional, que no tiene un proyecto ni idea general de país? Espero que los partidos entiendan esta situación.

En consecuencia, esta fragmentación no representa peligro para el dominio de Alan García, que va a tener más facilidad para gobernar porque no enfrentará presiones colectivas ni institucionales sino una diversidad de personas con las cuales va a poder negociar. Puede ser una suerte para García, pero es una desgracia para el Perú.

Ahora, los presidentes regionales del APRA apenas llegarían a cuatro. Lo mismo sucede con el partido de Ollanta Humala, que tuvo una participación importante en las elecciones hace 6 meses.

Si el APRA, con más de 50 años, organización y enraizamiento social, no pudo mantener sus doce regiones, menos lo haría Humala, que tiene seis meses de vida política y no tiene organización ni liderazgo. Insisto, si el APRA ha ganado en algún sitio no es porque sea el APRA, sino porque tiene caudillos como José Murgia, en La Libertad.

http://www.laprimera.com.pe/noticia.php?IDnoticia=33924

Chile ratifica ‘vocación asiática’

Chile ratificó su "vocación asiática" acordando apresurar las negociaciones para la conclusión de un tratado con Japón, en el marco de una iniciativa para crear una zona de libre comercio del Pacífico, compartida con otros países de una región en rápido crecimiento.

La presidenta chilena, Michelle Bachelet, y el primer ministro japonés, Shinzo Abe, exhortaron a acelerar los trámites en curso, en una reunión bilateral realizada en la noche del viernes, previamente a la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), que comenzó oficialmente en Hanoi ayer sábado.

Según el comunicado conjunto difundido tras la reunión, "los dos líderes instaron a los funcionarios de ambos países a acelerar los trabajos de cara a la firma del Acuerdo de Asociación Económica Japón-Chile", que "marcará una nueva era en la relación estratégica entre Japón y Chile".

Chile y Japón -segundo socio comercial del país latinoamericano después de Estados Unidos- acordaron meses atrás la "estructura" de un tratado de libre comercio (TLC), que abolirá los aranceles de exportación de 92% de los productos intercambiados.

La decisión de estrechar los lazos comerciales con Japón se inscribe en la estrategia chilena de apertura económica a todos los mercados mundiales a través de acuerdos bilaterales, pero con un acento particular en Asia, región con la que Santiago se propone integrar una zona de libre comercio.

$5.500 millones fue el intercambio Chile-Japón en 2005.

http://www.lahora.com.ec/frontEnd/main.php?idSeccion=501107

Distintos rumbos en América latina

Un estudio realizado en la Argentina, Chile, México y Brasil revela que las estrategias comerciales son divergentes y van desde alianzas con Estados Unidos hasta acercamientos con Asia

Las miradas de varios países de América no se cruzan.

Unos apuntan al oriente, otros al Norte y algunos a sus vecinos. Lo cierto es que si se tratara de una novela rosa, difícilmente el último capítulo terminaría con un romance.

Las grandes economías de América latina no parecen avanzar en el mismo sentido. Si bien todas transitan por aceptables momentos económicos, a la hora de elegir la estrategia comercial, los intereses se bifurcan.

Según una encuesta realizada en la Argentina, Chile, México y Brasil, cuatro de las economías más importantes de América latina, las preferencias a la hora de elegir socios comerciales son bien diversas. La muestra fue realizada por la consultora de opinión pública Ipsos-Mora y Araujo en la Argentina y por Ipsos en los otros países.

Por caso, los encuestados en el país se mostraron confiados en los beneficios que le arrojará al país promover relaciones comerciales con otros países de América latina: el 53% eligió estrechar allí el comercio. Pero la integración en la región no es una prioridad entre los otros países consultados. Los chilenos prefieren Asia, mientras que México y Brasil se volcaron hacia los Estados Unidos.

La opinión sobre el Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA) también fue medida y los resultados también fueron diversos. “En relación con el desarrollo del ALCA los países más interesados en su integración son Chile y México. En Brasil existe un porcentaje muy alto de indecisos. En cuanto a la Argentina, es allí donde existe la oposición más fuerte a la integración del bloque continental”, dice una de las conclusiones de la encuesta.

Alrededor del 25% de los consultados en el país dijo considerar bueno ingresar en el ALCA, mientras que el rechazo trepó a casi un 45 por ciento. En Chile la respuesta en favor de la integración en este bloque es del 80% y en México, de algo más del 60. De regreso al caso argentino, el 34% de los encuestados considera más beneficioso para el país promover relaciones comerciales con otros países de América latina, el 18% apuntó a la Unión Europea y, muy lejos quedó Estados Unidos, que apenas cosechó el 7% de las preferencias.

La encuesta fue realizada entre agosto y octubre y fueron consultadas 3600 personas, mayores de 18 años, en los cuatro países.

Sin embargo, uno de los indicadores más llamativos es la escasa seducción que despierta Asia en la encuesta. Mientras que gran parte del mundo mira a ese formidable mercado como una de las mayores oportunidades de las últimas décadas, sólo tres de cada 100 consultados en la Argentina optó por contestar que allí son más beneficiosas las relaciones comerciales.

"Las diferencias en las preferencias fue el dato más llamativo que arrojó la muestra. Llamaron mucho la atención las diferentes visiones respecto de lo que cada país ve como más beneficioso. Por ejemplo, sólo Chile se mostró muy confiado en los beneficios de Asia", dijo Santiago Lacase, coordinador en América latina de Ipsos en la división de opinión pública y director Ejecutivo de la Argentina.

Santiago Palma Cané, especialista en economía internacional y socio de la consultora Fimades, dijo que las respuestas están relacionadas con la experiencia real de cada país. "En México, por ejemplo, se tiene cerca la experiencia con los Estados Unidos, donde les ha ido bien. En Chile igual, hay mucha historia de relaciones comerciales. Pero en Argentina y Brasil hay menos experiencia de libre comercio", reflexionó Palma Cané.

Preferencias chilenas

Justamente Chile es, de los consultados, el que más diferencias muestra respecto de las opiniones de los otros países. Un 50% de quienes completaron el cuestionario reconocen en Asia el lugar del globo que más beneficios comerciales les deparará. El 24% dijo confiar en la Unión Europea, el 12% en América latina y el 10% en los Estados Unidos.

Pero aquí, bien vale hacer una aclaración. "No resulta raro que los chilenos elijan a Asia como el lugar del mundo donde puede haber mejores negocios. Los Estados Unidos están algo rezagados porque la relación con ellos es muy madura, está consolidada y tiene varios años. El flujo comercial entre ambos países es importante y ahora, los chilenos, buscan nuevos mercados", dijo, desde Chile, el economista y coordinador del Centro de Estudios Públicos (CEP), Harold Bayer.

"Además -agregó-, Chile tiene una larga historia en acuerdos comerciales de libre comercio. No hay una amenaza de invasión de productos chinos porque este país no tiene una industria manufacturera fuerte. Lo nuestro es proveer materias primas."

Brasil y México fueron los dos países que optaron por estrechar los lazos comerciales con Estados Unidos. Para el caso de México, la proximidad con la frontera norteamericana hace razonable la inclinación por buscar acercarse a la principal economía del mundo. El 40% de los encuestados eligió ese país, el 25% restante optó por América latina y el 16% miró hacia Europa. Al igual que en la muestra argentina, sólo tres de cada 100 optaron por mejorar las relaciones con Asia.

"México es una economía que compite en algunos productos con China. Por eso existe una suerte de desconfianza de estrechar los lazos con Asia por temor a una invasión de productos chinos", dijo el economista mexicano Macario Schettino, desde el Distrito Federal.

México mira al Norte

Según su visión, la relación con los Estados Unidos se ha ido estrechando al punto de que la industria está prácticamente integrada. "Es muy lógico que la elección sea acercarnos más a Estados Unidos, después de todo el comercio con ese país suman el 88% de las exportaciones total de México. Además, la industria es prácticamente una, está sumamente integrada", dijo Schettino.

Las respuestas de Brasil no sorprenden a quienes siguen el pulso comercial de la mayor economía de América latina. Pragmáticos y poco ideologizados, los brasileños se inclinaron por los Estados Unidos. "Brasil es un global trader , tiene a Estados Unidos como principal socio comercial y tiene negocios con casi todo el mundo. Es lógico que se consideren más importantes esas relaciones que un posible intercambio con América latina", dijo a LA NACION el economista Fabio Giambiagi, del prestigioso Instituto de Investigaciones Económicas Aplicadas (ver aparte).

Después de los Estados Unidos -que fue el preferido con el 26%-, el 15% de los brasileños optaron por América latina, el 11% por la Unión Europea y el 8% por Asia.

"Una de las cosas que llamó la atención fue el alto grado de desconocimiento sobre el tema que se dio en Brasil. Cuatro de cada diez encuestados no supieron contestar lo que se les preguntó", dijo Lacase.

A modo de resumen, Palma Cané considera que existe cierto desconocimiento en la Argentina sobre las conveniencia comercial de estrechar lazos con algunos bloques.

"Lo que veo es que los dos países que están más alineados con la realidad comercial del mundo son Chile y México. Chile mira al Pacífico y México a su vecino, Estados Unidos. Son países que están habituados a ver los beneficios de comerciar con ellos. Tienen políticas comerciales de años, consensos entre los partidos políticos sobre estos temas y claras políticas aperturistas. Mi visión es que, en Brasil y la Argentina, pecan de desconocimiento", finalizó Palma Cané.

La percepción de los encuestados es bastante similar respecto de la situación económica de sus respectivos países. La mayoría describe la situación del país como buena o muy buena.

Los mexicanos son apenas más críticos de su situación: el 41% sostiene que la coyuntura es favorable, el 38% que es bastante mala y el 14,6% que es muy mala.

"En México, la economía está ligada a la de los Estados Unidos. Para este año el crecimiento que se espera es de un 5% y para el año que viene, si bien se vislumbra una desaceleración, no creo que esté por debajo de entre un tres y un cuatro por ciento", dijo el economista mexicano.

Números robustos

Si bien los números macroeconómicos en México están en buena forma, según Schettino, la gran batalla que debe dar ese país es la lucha contra la economía informal. "Aquí el 40% de la economía es informal. Ese es el gran desafío de México, sólo que es un trabajo lento y que va a llevar mucho tiempo", concluyó.

Donde no existen nubarrones es en Chile. El precio del cobre, principal producto exportable de ese país, puso aún más combustible a una economía que ya funcionaba sin sobresaltos.

"Para este año consideramos que el superávit estará cerca del 8% del producto bruto interno (PBI) y la inflación no va a pasar el 2,9% anual -comentó Bayer-. El desafío que queda para Chile tiene que ver con bajar algo más el desempleo [ahora ronda el 7,9%] y con bajar la desigualdad."

Allí, también pesa la falta de gas que sufrió Chile en el último invierno. "Acá se sintió la falta de gas durante este año, por eso la economía creció algo menos. Hubo muchas empresas que tuvieron que migrar desde sistemas de generación a gas a otros combustibles", finalizó Bayer.

Por ahora, las percepciones de los encuestados no son más que eso. Podrán los Gobiernos seguirlas o no. Pero quizás de esa decisión dependa su futuro comercial en los próximos años.

Por Diego Cabot
De la Redacción de LA NACION

Link corto: http://www.lanacion.com.ar/860116
ACLARACION: Este blog no es antiperuano ni nacionalista chileno. Este blog simplemente recopila y (a veces) comenta sobre artículos recopilados en la prensa nacional y mundial y que involucran a Chile. Si parece "cargado" hacia Perú, simplemente, es resultado de la publicación constante -y obsesiva- en ese país de artículos en que se relaciona a Chile. Así también, como ejemplo opuesto, no aparecen articulos argentinos, simplemente, porque en ese país no se publican notas frecuentes respecto Chile. Este blog también publica -de vez en cuando- artículos (peruanos o de medios internacionales) para desmitificar ciertas creencias peruanas -promovidas por medios de comunicación y políticos populistas de ese país- sobre que Perú ha superado el desarrollo chileno, lo que es usado en ese país para asegurar que Chile envidia a Perú y que por eso buscaría perjudicarlo. Es decir, se usa el mito de la superación peruana y la envidia, para incitar el odio antichileno en Perú.